miércoles, 11 de noviembre de 2009

" El Precio de la Fama"

Cuando su carrera futbolística mejor marchaba…, empezó a decaer. El granjugador de aquel equipo que también marchaba, tanto en su país como portodo el continente, se lesionó en un partido contra un rival directo porel título. Era uno de los grandes jugadores del continente, uno deaquellos que hacía a sus seguidores pelearse por él y desear verle cadadomingo jugar en la cancha. Pero esa lesión, de la que no se esperabagravedad, hizo que pasara los días más amargos de su vida, ya que elfútbol era lo más importante para él. Para consolarse de tal desgraciacomenzó a beber sin mesura. Le era infiel a su mujer con jovencitas de laciudad. También empezó a tomar drogas… Todo era un desastre en ese momentopara el gran jugador. Su mujer, desesperada por la situación de su marido—ya que le maltrataba y pegaba a sus hijos cuando llegaba a casa borrachoy un sinfín de fechorías hacia sus seres más queridos—, decidió terminarcon todo ese asunto. Luchó por demostrar a su marido que, por mucho queame al fútbol, siempre estará con él lo más importante en la vida: suFamilia. El gran jugador lesionado, recapacitó y pidió mil disculpas tantoa su familia como a sus seguidores y a su equipo por la imagen dadadurante los últimos meses. A partir de entonces, prometió entregarse yluchar por cambiar la imagen dada y esforzarse al máximo para acelerar surecuperación. Se dio cuenta de que, aunque lo ocurrido sucediese en elmomento futbolístico más importante de su carrera, no era justo tirar latoalla. Con la ayuda de psicólogos especialistas, fisioterapeutas, sufamilia, su equipo y su voluntad, volvió a pisar la cancha de fútbol;volvió a sonreír; volvió a sentirse persona. Y lo más importante, sufamilia estaba en la grada feliz viéndole jugar y disfrutando de ver a eseser querido por el que tanto habían luchado, que un día, por una absurdalesión, quiso tirar su vida por la borda.

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